Economía
La economía de Libia se basa en el petróleo, que constituye la práctica totalidad de sus exportaciones (95 %). Libia pertenece a la OPEP desde su fundación. Asimismo hay industria relacionada con el petróleo y de refino, energía, así como de bienes de consumo, cemento y textil. La economía de Libia es la sexta de África, después de las de Sudáfrica, Nigeria, Egipto, Argelia y Marruecos.
En Libia se construye el Gran Río Artificial, uno de los proyectos de ingeniería más grandes y costosos (unos 24 000 millones de dólares) de la humanidad. Comprende la instalación de inmensas tuberías para transportar el agua de los acuíferos fósiles del Sáhara (depósitos naturales subterráneos que sobreviven desde la época en que el desierto era una fértil sabana y bosque) desde el sur del país hasta la costa, donde se concentra la población.
En la región de Kufra, al sur del país, existe un importante proyecto hídrico y de irrigación que pretende desarrollar los cultivos de vegetales en el desierto. El riego se hace con agua subterránea, ya que las lluvias en la región son prácticamente inexistentes. La irrigación se lleva a cabo a través del sistema radial. El oasis de Kufra es una de las creaciones humanas que mejor puede verse desde el espacio. Cada círculo tiene aproximadamente 1 km de diámetro.
Zona financiera de Trípoli.
En 2017, el 60% de la población libia sufren de malnutrición. 1,3 millones de personas de una población total de 6,4 millones están esperando ayuda humanitaria de emergencia